Sigo revisando las fotos de mis vacaciones bretonas.
En esta ocasión, he realizado una serie sobre Quiper, la primera ciudad que visité, y de la que guardo un bonito recuerdo.
Un paseo por las pasarelas del río, todas engalanadas con flores;
por el centro histórico, cuidado en todo detalle;
y como colofón comimos unas excelentes crepes.
¿qué más se puede pedir?
Las fotos las he editado con un pequeño toque "vintage", ya que parece que así me lo pedían.
Un saludo,